Nobody said it was easy.
viernes, 27 de julio de 2012
miércoles, 25 de julio de 2012
Que sea Domingo otra vez.
Te miro, me acuerdo y me dolés un poco.
No puedo superar que lo que queda está roto.
Ahora no estás acá, hoy nada tiene sentido.
Ahora te lloro, el Domingo que viene te olvido.
No puedo superar que lo que queda está roto.
Ahora no estás acá, hoy nada tiene sentido.
Ahora te lloro, el Domingo que viene te olvido.
viernes, 13 de julio de 2012
Retomemos.
Hace mucho que no me rompían el corazón. Ya se me había olvidado cómo se sentía. Se me había olvidado cómo era hacer cualquier cosa y sentir siempre que algo adentro te duele un poquito, que algo te falta, algo... Algo se fue, para siempre.
¿Y si...? Suposiciones, de nuevo.
Basta Paula, se fue.
No fue, no era, no tenía que.
Chau... forro.
¿Y si...? Suposiciones, de nuevo.
Basta Paula, se fue.
No fue, no era, no tenía que.
Chau... forro.
viernes, 22 de junio de 2012
Here we go
Evaluemos.
Cagarme en el amor no está surtiendo efecto.
Necesito un plan B, necesito un plan B, necesito un plan B...
Enamorarme.
Sí, sentir maripositas en el estómago y todo eso.
Cagarme en el amor no está surtiendo efecto.
Necesito un plan B, necesito un plan B, necesito un plan B...
Enamorarme.
Sí, sentir maripositas en el estómago y todo eso.
lunes, 18 de junio de 2012
El olvido
Y de repente un día, sin buscarlo, eso aparece. Cuando menos lo esperás.
Aquel viejo vestido, la inspiración, el amor... el olvido.
Y de repente un día, sin buscarlo, ya no me acuerdo de quién sos ni porqué te quise.
Aquel viejo vestido, la inspiración, el amor... el olvido.
Y de repente un día, sin buscarlo, ya no me acuerdo de quién sos ni porqué te quise.
martes, 12 de junio de 2012
domingo, 3 de junio de 2012
Presentimiento
A menudo sé cuando voy a terminar mal, son cuestiones que uno inexplicablemente presiente. Y aún así sigo adentrándome en los asuntos con el mismo entusiasmo de siempre. Para qué detenerme, para qué reflexionar, para qué cuidarme, para qué evitar.
jueves, 31 de mayo de 2012
Levantarte simpática
Siempre tuve esa sensación de que hay personas que realmente se esfuerzan en ser cada día más pelotudas de lo que ya son. Es increíble y, quizás, un poquito admirable. Yo los aplaudo por no tener reparo en demostrarlo al mundo día tras día. Salud por ustedes, ¡pelotudos!
domingo, 27 de mayo de 2012
Crack
Algo se está rompiendo, podés sentirlo ahí dentro. Al fondo a la izquierda, se rompe. Se rompe, duele; duele y se desparrama. Se extiende, te inmoviliza.
Ok, te cuesta moverte, no podés respirar, tu garganta es un nudo.
Frío. Más frío. Calor.
Te parás en seco, temblás, te agitás. ¿Pensar? En otra ocasión.
Y ahí vienen las lágrimas finalmente, y sabés que se ha roto.
No hay vuelta atrás.
Ok, te cuesta moverte, no podés respirar, tu garganta es un nudo.
Frío. Más frío. Calor.
Te parás en seco, temblás, te agitás. ¿Pensar? En otra ocasión.
Y ahí vienen las lágrimas finalmente, y sabés que se ha roto.
No hay vuelta atrás.
lunes, 21 de mayo de 2012
Oh no, más reflexiones.
Bien, supongo que no debe ser realmente necesario reflexionar acerca de todo. Generalmente cuando lo hago encuentro razones hasta para aquello que creía que no tenía. Y no es bueno. Las razones no siempre son buenas, no siempre son las que esperamos que sean, no siempre tienen que ver con lo que nosotros creemos. Supongo que entonces debería dejar de cuestionarme todo, de intentar buscar porqués en todos los asuntos que me rodean. Simplemente debería disfrutar el momento, dejarme llevar, aprovechar... que no hayan más razones que esas.
No querer que hayan más razones. Dejar de imaginar, de formular posibles hipótesis, de construir castillos en el aire.
Dejarme llevar, reírme más, ser.
No querer que hayan más razones. Dejar de imaginar, de formular posibles hipótesis, de construir castillos en el aire.
Dejarme llevar, reírme más, ser.
domingo, 6 de mayo de 2012
Días grises
Siempre habrán días grises. Días en los que me invento cosas para justificar mi falta de ánimo. Días en los que nadie me quiere, en los que no tengo amigos, en los que a él ya no le importo. Y no quiero ver a nadie, y que nadie me vea... Y no quiero hablar, ni que me hablen. Y no quiero querer, no quiero sentir, no quiero vivir. Sólo algo tiene sentido, sólo eso. Sólo, sólo, sólo... Sola. Otra vez.
Y acá vamos.
lunes, 23 de abril de 2012
El día de las despedidas.
Ahora sí, dale. Me olvido, te olvidás, me olvido, te olvidás, me olvido, te olvidás, me olvido. Listo, me olvidé. ¿Te olvidaste?
Nunca más.
¿Felicidad? Próximamente.
Buena suerte y hasta nunca.
Nunca más.
¿Felicidad? Próximamente.
Buena suerte y hasta nunca.
Adiós
Suspiraban lo mismo los dos, y hoy son parte de una lluvia lejos.
No te confundas, no sirve el rencor. Son espasmos después del adiós.
Ponés canciones tristes para sentirte mejor, tu esencia es más visible.
Del mismo dolor vendrá un nuevo amanecer !
Tal vez colmaban la necesidad, pero hay vacíos que no pueden llenar.
No conocían la profundidad, hasta que un día no dio para más.
Quedabas esperando ecos que no volverán, flotando entre rechazos.
No te confundas, no sirve el rencor. Son espasmos después del adiós.
Ponés canciones tristes para sentirte mejor, tu esencia es más visible.
Del mismo dolor vendrá un nuevo amanecer !
Tal vez colmaban la necesidad, pero hay vacíos que no pueden llenar.
No conocían la profundidad, hasta que un día no dio para más.
Quedabas esperando ecos que no volverán, flotando entre rechazos.
Separarse de la especie por algo superior no es soberbia, es amor.Poder decir adiós es crecer.
sábado, 21 de abril de 2012
Él quería enamorarse.
Él quería enamorarse. Yo no. Y no hay mucho más que agregar. Él tenía ganas de todo, yo de muy poquito. Él daba mucho, a cambio de nada.
"Si no das no tenés derecho a recibir" me dijeron, y eso fue todo. Me fui, se fue, nos fuimos. No siempre vale la pena luchar, y no luchamos. Fue una historia corta, simple, sin aderezos... sencilla.
Aunque, quizás, todo siempre sea más sencillo para el que no siente, para el que no quiere, para el que no espera nada.
martes, 17 de abril de 2012
Brick by brick
Espero que no haya sido así, así desde el comienzo. Y espero que no lamentes el haberme conocido. Espero que no haya dolor dentro de tu corazón, porque el mío se cae en pedazos... when i'm far away from you.
lunes, 16 de abril de 2012
Aquello que queda. Aquello que duele
Cosas que te quedan. Un vinilo escrito, un retazo de jean, una billetera rota, media docena de cartas... Un corazón medio estropeado. Cosas que te quedan en lugar de algo que te falta, cosas que tenés en lugar de algo que perdiste. Recuerdos. Momentos que ya no están.
Cosas que guardás. Algunas tarjetas, un par de fotos, unos lentes viejos... Una vida con un poquito menos de sentido.
Cosas que guardás. Algunas tarjetas, un par de fotos, unos lentes viejos... Una vida con un poquito menos de sentido.
domingo, 15 de abril de 2012
Intentar
Sé que no basta. Siempre quiero más, aun cuando sé que no se puede, que la voluntad no siempre es suficiente. Siempre quiero ir más allá, probar, intentar, soñar un poco... Creer que puedo hacer que el otro también quiera, también pruebe, también intente. Es tan sencillo... Simplemente es cuestión de intentar algo, de creer que es posible, y a menudo creo que todo es posible si se lo quiere tremendamente. Sólo se trata de esfuerzo, de perseverancia, de FÉ. Y ahí está la cuestión. FÉ. Eso, ciertamente, es algo complicado en estos tiempos. De todos modos yo sigo soñando, intentando que los demás quieran.
Pero...
¿Y si él no quiere?
Pero...
¿Y si él no quiere?
« Da igual. Prueba otra vez. Fracasa otra vez. Fracasa mejor »
Samuel Beckett
viernes, 13 de abril de 2012
Cuándo alejarse
Uno siempre tiene que saber cuándo alejarse. Cuando es evidente que los sentimientos son desencontrados, que lo que hace el otro no alcanza, que las intenciones son distintas, que la carga emocional no es la misma. Cuando el corazón está a punto de involucrarse, cuando los abrazos empiezan a causar efecto, cuando se comienza a extrañar... Cuando sabemos que estamos a nada de reclamar cosas de las cuales no tenemos derecho.
Siempre puede llegar ese momento, aquel en el cual tengamos que rendirnos; donde lo único que debemos hacer es apretar el corazón y marcharnos, partir con nuestras ilusiones y nuestras ganas de más a otro sitio. Como si fuera fácil...
Irnos para evitar sentir más, para evitar futuras heridas, para no tener que obligarnos a olvidar luego. Y es en este momento donde debemos procurar no quedar en evidencia, que el otro no se de cuenta, que no nos descubra. Simplemente marcharnos; como si nunca hubiese pasado nada, como si nunca hubiésemos pretendido más, como si jamás hubiésemos querido quererlo. Irnos.
Siempre puede llegar ese momento, aquel en el cual tengamos que rendirnos; donde lo único que debemos hacer es apretar el corazón y marcharnos, partir con nuestras ilusiones y nuestras ganas de más a otro sitio. Como si fuera fácil...
Irnos para evitar sentir más, para evitar futuras heridas, para no tener que obligarnos a olvidar luego. Y es en este momento donde debemos procurar no quedar en evidencia, que el otro no se de cuenta, que no nos descubra. Simplemente marcharnos; como si nunca hubiese pasado nada, como si nunca hubiésemos pretendido más, como si jamás hubiésemos querido quererlo. Irnos.
jueves, 22 de marzo de 2012
Ok
Ok. ¿Cómo superar que él lo ha superado?
Cómo asumir que se terminó, que no lo aprovechaste, que yo no hay vuelta atrás. Él te cuenta de sus nuevas historias y vos, infelizmente, atendés. Atendés mientras pensás en que vos no podés ni siquiera intentar contarle algo interesante de tu parte porque lo único que tenés en este momento es un par de pelotudos atrás y media docena de historias frustradas. Entonces le contás eso, le contás de tus historias frustradas. Y él se atreve a darte consejos, lo cual es genial. Pensás "Cómo carajo llegaste a esto, Paula". Y la respuesta es muy simple y la sabés. Siendo forra. Nada más ni nada menos. No te portaste bien, él se fue. SIMPLE.
No aprendés más. Y no querés. No aprendés, no querés, no aprendés, no querés. La repetición es un recurso tremendamente efectivo, osea que vas a seguir cometiendo errores pelotudos, y vas a seguir sin aprender un carajo. Qué alivio.
Cómo cerrar historias. Cómo superar el hecho de que sos un poquito hija de puta. Imposible.
miércoles, 8 de febrero de 2012
Solamente él
Solamente él supo entenderme, supo aceptarme como era, supo amarme con mis locuras y defectos y sin exigir nada a cambio... Solamente él me amó incondicionalmente y por encima de todo y todos. Supo perdonarme cuando no lo merecía, abrazarme cuando lo necesitaba, estar cuando nadie más estaba. Él me conocía más que a nadie, sabía cuando estaba mal, cuando tenía ganas de llorar, cuando tenía ganas de reír exageradamente, cuando tenía ganas de salir corriendo. Él se reía con cada cosa que yo hacía, hasta con cosas que otros no toleran, él sabía cómo hacerme sentir bien siempre, sabía cómo hablarme, cómo hacerme sentir importante. Él sabía cómo quererme. Sabía de más que no era perfecta, y jamás pretendió que cambiara en nada, me quiso tal cual era y se prometió a sí mismo quererme para toda la vida. Él hizo de mi una parte necesaria de él. Yo era su pequeña, y mientras estuviera con él sabía que nada podía pasarme, porque él iba a estar ahí para defenderme, para protegerme.
Con él podía ser yo tal cual era... Idiota, orgullosa, peleadora, egoísta, mala, fría, caprichosa, inmadura... Imperfecta. Con él fui yo misma, sin retoques. Él me amaba de todos modos, no hacía falta que fingiera ser nada que no era. Con él fui espontánea, libre, feliz por momentos.
Y quizás jamás nadie vuelva a amarme como él, a entenderme como él, a abrazarme como él, a mirarme como él... como si no hubiera nada más importante en ese momento. Quizás nadie pueda sentir nunca lo que él sintió por mi, quizás nadie pueda nunca entregarse como él se entregó conmigo.
Pero como a todas las cosas que prometen hacerme bien en este mundo lo dejé ir. No era para mi, no. Yo no lo merecía. (Y no quise merecerlo)
Con él podía ser yo tal cual era... Idiota, orgullosa, peleadora, egoísta, mala, fría, caprichosa, inmadura... Imperfecta. Con él fui yo misma, sin retoques. Él me amaba de todos modos, no hacía falta que fingiera ser nada que no era. Con él fui espontánea, libre, feliz por momentos.
Y quizás jamás nadie vuelva a amarme como él, a entenderme como él, a abrazarme como él, a mirarme como él... como si no hubiera nada más importante en ese momento. Quizás nadie pueda sentir nunca lo que él sintió por mi, quizás nadie pueda nunca entregarse como él se entregó conmigo.
Pero como a todas las cosas que prometen hacerme bien en este mundo lo dejé ir. No era para mi, no. Yo no lo merecía. (Y no quise merecerlo)
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